Hoy se celebró La Salud de Cañu, una cita que como el resto de celebraciones, desde que estamos en plena pandemia vio reducidos los actos al mínimo. A las doce del mediodía se oficiaba la misa, que siempre es multitudinaria y que hoy fue seguida por un centenar de devotos: vecinos de Cañu, pero también personas que son fieles a La Salud y que se desplazaron desde concejos vecinos como los de Amieva y Parres. El párroco de Cangas de Onís, Diego Macías ofició la misa y tuvo un emotivo recuerdo para Inés Alonso Fernández, la joven de quince años, vecina de Arriondas y con raíces en el concejo de Amieva, que perdía la vida el pasado miércoles. Tras la misa no hubo la habitual procesión, ni tampoco la subasta del ramu y quema de gigante, como en años anteriores.
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El sol acompañó durante la ceremonia.
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Aroa Moriñigo, pongueta de San Ignacio, con su madre, Covadonga.
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Un momento de la misa.
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Separación entre los feligreses.
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A la sombra del Texu.
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Cruz y bandera.
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González Castro y Longo, alcaldes de Cangas y Parres.
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Ofrendas a la Virgen de la Salud.
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El párroco de Cangas de Onís, Diego Macías, ofició la misa.
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La Comunión, desde que estamos en pandemia, se da en la mano.
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Hidrogel antes de la comunión.
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