«El paisanaje de la Comarca es fundamental para que el cliente se sienta bien y quiera repetir»

20 años del Parador de Cangas de Onís

Se acaban de cumplir 20 años desde que el Parador de Cangas de Onís abría sus puertas por primera vez, una inauguración que tuvo como protagonistas a Francisco Álvarez Cascos, por entonces vicepresidente primero del gobierno de José María Aznar, y a Rodrigo Rato, vicepresidente económico. Los dos inauguraron el Parador –que cuenta con 64 habitaciones– acompañados por el presidente del Principado, Sergio Marqués, al que ningunearon y cuyo nombre ni siquiera aparece en la placa inaugural. Aquellos días había estallado la guerra en el PP regional, algo que desembocó en la escisión de la URAS. De aquello han pasado dos décadas y cinco directores diferentes han regido los destinos del establecimiento: César Álvarez, Manuel Vieites, Alberto San Sebastián, Javier Álvarez y el actual, Ignacio Bosch, que dirige el Parador desde 2013.

Los vicepresidentes del Gobierno, Rodrigo Rato y Francisco Álvarez Cascos; el presidente del Principado, Sergio Marqués; el alcalde de Cangas de Onís, Miguel Ángel Villoria y la secretaria de Estado de Turismo, Elena Pisonero, cortando la cinta inaugural del Parador de Cangas de Onís en julio de 1998.

– Con usted al frente el Parador ha vivido los dos últimos años una ocupación muy alta. En julio y agosto hablamos del 97% y el 99%, lo que supone la cifra más alta de la red de Paradores,  y además los usuarios de TripAdvisor les han premiado dos años seguidos como el mejor de todos los Paradores de España ¿Cómo se consigue eso?

– Tanto las cifras de ocupación como el nivel de satisfacción de los clientes se deben al trabajo de muchas personas: todos, los 40 trabajadores que tiene de media el Parador; pero yo tengo muy claro que el paisanaje de la Comarca es fundamental para que el cliente se sienta bien y quiera repetir. Aquí, como ocurre también en Cangas del Narcea con los clientes del Parador de Corias,  encuentran una hospitalidad entre los vecinos que no es habitual en otros lugares de España. Espero que ese paisanaje, lo mismo que el paisaje, se cuide para que continúe siendo un sello de la Comarca. Y esto que le estoy diciendo a usted lo digo en las reuniones que tengo con otros directores de Paradores, que las buenas cifras de este Parador, en buena medida, se deben al donde está ubicado y a la hospitalidad de sus gentes.

– ¿Cuál es el cliente tipo de este Parador?

– Hay que diferenciar dos tipos de clientes teniendo en cuenta las épocas del año. Tenemos, de abril a julio y en septiembre y octubre, clientes extranjeros; hay momentos que todos los hospedados son extranjeros, lo que nos obliga a modificar los horarios y adaptarnos a los suyos en lo que a comidas y cenas se refiere. Se trata de clientes ingleses, franceses y también alemanes. La mayoría llega en ferry y viaja con su coche, muchos vehículos clásicos. Un tipo de cliente de un poder adquisitivo importante y que hace un gasto importante en el Parador también en lo que a restauración se refiere. Y tenemos al cliente nacional, proveniente de Madrid, Barcelona, Andalucía y Valencia por este orden, que se hospeda en los meses de julio y agosto. Hay un gran número de estos clientes que son fieles al Parador y a la red y que repiten visita año tras año.

– ¿Y la estancia media?

– En verano están entre 2 y 3 noches, pero son muchos los que después de estar aquí y descubrir lo mucho que se puede ver en esta Comarca, quiere ampliar la reserva y no pueden, por tratarse de las fechas que se tratan. Todos aseguran que volverán con más tiempo.

– ¿Saben donde vienen y todo lo que pueden hacer aquí?

No,  se sorprenden cuando les digo que tienen que ir a Ponga, que es una visita imprescindible, y que pueden hacer una ruta por un buen número de cuevas prehistóricas o visitar queserías... Todos quieren ir a Covadonga y a Los Lagos, pero muchos desconocen que hay otras muchas cosas que se pueden hacer estando aquí varios días.

– Hace 20 años Internet era aún una quimera y, sin embargo, ahora todo el mundo hace sus reservas a través de la red y del todopoderoso Booking. ¿Sigue reservando alguien aún por teléfono?

– Pocos, pero si. Esos clientes fieles de los que les hablaba antes, que llevan años viniendo al Parador y que conocen a los trabajadores, llaman y hacen su reserva. También se reciben reservas a través del call center de Paradores, yo diría que aún queda un 10%, el resto es todo a través de internet.

– Yo creo que no hay director de este Parador al que no le hayamos preguntado por la piscina y el campo de golf, dos obras que llegaron a barajarse pero que nunca cuajaron.

– Es cierto, la piscina es algo que siempre ha estado ahí, se planteó si hacer una piscina de verano o una climatizada, con lo que esto supone de mantenimiento..., y el campo de golf, que de ser realidad sería, creo, vinculado a una gestión privada y no directamente desde el Parador. Pero que no se hayan acometido estas inversiones no quiere decir que no se haya ido mejorando el Parador en estos años. Este año sin ir más lejos tuvimos varios meses cerrada toda el ala “nueva”, para remodelar por completo las habitaciones, paredes, suelos, insonorización... y en 2019 está previsto que se lleve a cabo una gran inversión en las cocinas y el restaurante, estamos hablando del orden de un millón de euros de inversión en estas obras de las que le estoy hablando. También vamos a hacer, ahora que contamos con el permiso de la Confederación, un acceso desde el jardín a la playa de arena del río Sella que está junto al mismo Parador.