ENTREVISTA con David Villar, director general de Medio Natural y Planificación Rural

david-villar-desarrollo-rural
photo_camera david-villar-desarrollo-rural

Planificación Rural de Asturias

Geólogo, conocedor del mundo rural,  con experiencia profesional en la empresa privada y también en Tragsa, donde estuvo varios años. David Villar es el director general de Medio Natural y Planificación Rural, lo que ahora mismo supone que bajo su responsabilidad estén todos los espacios protegidos del Principado, entre ellos el Parque Nacional de los Picos de Europa.

– ¿Qué opina de la manifestación que se celebró en Cangas de Onís hace unos días, pidiendo otra vez soluciones a los daños que causa el lobo?

– Desde el respeto y la comprensión con cualquier colectivo que vea sus intereses amenazados, somos especialmente sensibles con el sector primario que diariamente contribuye con su trabajo al mantenimiento del ecosistema del Parque Nacional de Picos de Europa. Por eso, estos hechos nos reafirman en nuestra posición de defensa de la coexistencia entre la actividad socioeconómica y la conservación de la biodiversidad, este es el futuro para Picos y para el resto del territorio donde existen problemáticas similares.

Confío plenamente en que el equipo de la Viceconsejería de Infraestructuras, Movilidad y Territorio, que ahora gestiona este Plan de Acceso a Lagos y que evaluará todas las opciones que garanticen el mínimo impacto con el mayor beneficio para el conjunto de la sociedad, que podrían pasar por nuevos accesos rodados o incluso teleférico como en otras áreas de alta montaña.

– Dicen desde el sector ganadero que el Plan de Gestión del Lobo no funciona y que ni siquiera se cumple.

– Desde la Administración nuestro deber es gestionar, en el marco legal vigente, los recursos naturales de forma que su aprovechamiento sostenible permita una viabilidad a las actividades que se realicen en el medio rural. En el caso de la coexistencia de la ganadería con los grandes carnívoros, el Plan de Gestión del Lobo, cuya segunda versión data del 2015, se someterá este año a una revisión profunda que evaluará la consecución de los objetivos marcados y permitirá desarrollar un Plan para los siguientes cinco años. Comparando otros territorios con una problemática similar, nuestro Plan fue pionero y sirve de referencia para otras Administraciones, puesto que su ámbito es mucho más amplio que el control poblacional de la especie y es ahí donde debemos trabajar, en desarrollar completamente todas las medidas contempladas: líneas de prevención colectiva, mejora integral del procedimiento de compensación de daños, actualización del baremo, etc…y son cuestiones que estamos abordando de forma prioritaria.

El objetivo principal será, por tanto, disponer de un Plan, que como el actual se base en sólidos conceptos científicos y en el que todos los colectivos se vean representados, esperando que de este modo el debate  sea la rentabilidad de las explotaciones agroganaderas, no el número de ejemplares que se extraen dentro del Programa de Control.

– Tampoco creen, los Pastores de los Picos de Europa, que los mastines que proponen desde la Consejería sean la solución a sus problemas.

– Las medidas que permitan compatibilizar la ganadería en extensivo con la presencia de grandes carnívoros son amplias y deben de armonizarse con las características de manejo y las condiciones de cada territorio. En el Plan se proponen algunas líneas, entre ellas la presencia de perros de guarda, y es uno de los aspectos que estamos estudiando precisamente en Picos, con el Proyecto Reciella en Red, donde además del ganado, se monitoriza también al propio mastín. Este tipo de información, que será analizada por personal experto y compartido con el sector ganadero, nos permitirá obtener datos de valor para proponer las mejores prácticas en cada territorio.

La línea de sostenibilidad y de persistencia de las actividades tradicionales es la que impera en el nuevo texto del PRUG del Parque Nacional

– El alcalde de Onís parece haber aparcado el deseo de sacar a “su” concejo del territorio del Parque Nacional. ¿Hay compromiso de que van cambiar las cosas en lo que a la gestión de los Picos de Europa se refiere? ¿El esperado PRUG supondrá un antes y un después?

– Independientemente de las expectativas que cada concejo pueda albergar sobre la figura que representa un Parque Nacional, hay que valorar la situación desde el interés general y con el foco puesto en el desarrollo territorial. Con las circunstancias de crisis que estamos viviendo, se ha vuelto la vista al medio rural y su futuro parece ligado indefectiblemente a los recursos naturales, a su conservación y a su aprovechamiento sostenible. Esa línea de sostenibilidad y de persistencia de las actividades tradicionales es la que impera en el nuevo texto del PRUG, que efectivamente esperamos afiance las cuestiones que ya funcionan y minore aquellas que pueden haber supuesto algún conflicto en el pasado, especialmente para los habitantes permanentes de este espacio protegido.

– ¿Ve usted un tren cremallera llegando a Los Lagos de Covadonga?

La nuevas formas de movilidad tienen que plantearse desde el consenso y la sostenibilidad, orientando los esfuerzos a la eficiencia y la sostenibilidad. Disponemos de un ejemplo cercano con el funicular de Bulnes, en el que una solución de transporte se convierte también en un atractivo turístico, por lo que se deberán evaluar los proyectos desde un punto de vista holístico, contemplando todo lo que aporta al territorio. Confío plenamente en que el equipo de la Viceconsejería de Infraestructuras, Movilidad y Territorio, que ahora gestiona este Plan de Acceso a Lagos y que evaluará todas las opciones que garanticen el mínimo impacto con el mayor beneficio para el conjunto de la sociedad, que podrían pasar por nuevos accesos rodados o incluso teleférico como en otras áreas de alta montaña.

– Parece que sobre el campo asturiana se ciernen nubarrones con la nueva PAC,  ¿hay motivos para temer que se pierdan ayudas?

– El sector agroalimentario español y las Comunidades Autónomas pedían que se mantuviera el presupuesto de la Política Agrícola Común (PAC) actual para España: unos 47.500 M€ para todo el período. Ese objetivo se ha cumplido y en unas condiciones que no han sido nada fáciles, con un contexto como el actual, tras la contingencia que supone la salida del Reino Unido de la UE y la crisis provocada por la pandemia de COVID-19, que requiere la movilización de gran cantidad de recursos públicos.

La PAC supone unos 6.800 M€ al año en nuestro país, un presupuesto muy importante, no sólo para el mantenimiento de la actividad agraria, sino también para inversiones que contribuyen a mejorar su competitividad, sostenibilidad además de generar oportunidades en el medio rural, que pasarán además por las estrategias que acompañan al Pacto Verde Europeo: Desde el Campo a la Mesa y la Estrategia de Biodiversidad, por lo que el 40% de los fondos de la PAC se destinarán a actuaciones de lucha contra el cambio climático o cuestiones medioambientales.

Por tanto Asturias parte de una buena posición para la nueva PAC, puesto que el modelo de producción es medioambientalmente sostenible y está ligado a la actividad en zonas de alta montaña y dentro de la Red Natura. Desde la Consejería de Medio Rural entendemos que estos modelos serán positivos tanto para la ganadería extensiva como para el sector lácteo, una posición compartida por el resto de comunidades de la cornisa cantábrica. En este esquema se enmarca el impulso a la figura del agricultor genuino, que vive y trabaja en el medio rural, lo que supone un impulso al modelo de explotación agroganadera familiar y sostenible de la cornisa cantábrica.

– Su dirección general se ocupa también de la Planificación Rural, explíquenos que abarca ese título.

– Relacionado con el punto anterior, las nuevas estrategias europeas relacionadas con la Política Agraria Común y el Pacto Verde Europeo ponen el foco en los recursos naturales y la sostenibilidad de su aprovechamiento, que debe redundar en una mejora de la biodiversidad y de la calidad (paisajística, del agua, del aire, etc.) de nuestro entorno.

Por tanto, se considera prioritario que la estrategia relacionada con la planificación y gestión de los fondos europeos que recibe el medio rural asturiano cuente con una visión alineada con esas nuevas políticas europeas, donde el Medio Natural cobra especial relevancia y se enmarca como un instrumento para garantizar la sostenibilidad del sector primario.

La gestión ordenada y coordinada, con una planificación transversal de todos los aspectos que abarca el desarrollo territorial, es la tarea que abordamos ahora desde esta Dirección General y sobre la que volcaremos nuestros esfuerzos.

– Vivimos en la incertidumbre de la pandemia. ¿Cómo ha afectado esta situación a la hoja de ruta que tenía su dirección general para este año?

– Esta situación excepcional que aún estamos viviendo como consecuencia de la pandemia ha afectado a todos los sectores, y en el caso de la Administración, considero que se ha hecho un gran trabajo desde el ejecutivo Asturiano para poner el foco en la seguridad y la salud de las personas. Por otro lado, el resto de engranajes de la Administración ha tenido que adaptarse de forma acelerada a una situación sobrevenida, forzando una transformación digital necesaria.

Con este nuevo esquema, la prioridad de esta Dirección General sigue siendo la de planificar y ordenar el conjunto de espacios protegidos, desarrollando la Red Natural de Asturias y vertebrándola desde el punto de vista de los instrumentos normativos y las inversiones necesarias tanto para su uso público como sobre todo, para los habitantes permanentes de estas zonas.