«Los ganaderos deben ejercer su derecho de reclamación»

concha-merino-cartel-leche
photo_camera La abogada Concha Merino.

Entrevista con la abogada Concha Merino

El próximo 11 de julio se cumplirá un año de la resolución de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia que multó con 80,6 millones de euros a varias de las grandes empresas agroalimentarias que entre los años 2000 y 2013 compartieron información privilegiada e intercambiaron datos de los ganaderos a los que compraban para pactar los precios de la leche.

Desde entonces, los ganaderos afectados tienen la opción de reclamar una indemnización. La abogada Concha Merino es una de las especialistas que se está haciendo cargo de tramitar esas reclamaciones. El pasado mes de enero ofreció una charla en Lugo de Llanera y ahora cuenta a EL FIELATO Y EL NORA los detalles del proceso.

–¿Hasta cuándo tienen de plazo los ganaderos para presentar sus reclamaciones?

–Defiendo que en este caso en concreto hay que acogerse al plazo de un año desde que se dictó la resolución. Debido a la crisis sanitaria, todos los plazos quedaron suspendidos, pero ya se han vuelto a retomar, por eso quien aún no haya dado el paso, que no espere al último día.

Las empresas necesitan a los ganaderos, aunque quisieran dejar de comprarles no les saldría rentable. Y no hace falta reclamar contra una empresa concreta, vale contra el cártel.

–¿Cuáles cree que son los motivos de quienes están tardando en decidirse?

–Muchos ganaderos piensan que tienen que esperar a tener un informe del FEGA (Fondo Español de Garantía Agraria) porque no conservan las facturas, pero se trata de una reclamación extrajudicial y puede llevarse a cabo aunque no se tengan todos los datos. Ahora mismo nos sirve con saber la cuota que tenían. El FEGA también ha estado parado y aunque vuelva a funcionar, no creo que los informes lleguen a tiempo. Lo más importante ahora es que deben ejercer su derecho de reclamación.

–¿Quiere decir que hay posibilidad de no terminar en juicio?

–Sí, desde el primer momento abrimos la opción extrajudicial, que posibilita una negociación. Pero es algo que dependerá de las empresas, para nosotros la última vía será ir a juicio, vamos a agotar antes todas las que tenemos nuestro alcance.

Fue una práctica que, además, se extendió por todo el territorio nacional. Así que cualquiera que en esos años estuviera en activo, puede reclamar

–¿Cuántos son los ganaderos afectados por estas conductas fraudulentas de las empresas?

–Es difícil de cuantificar porque este proceso también incluye a ganaderos jubilados e incluso a herederos. Podemos decir que básicamente todos los que entre los años 2000 y 2013 vendieron la leche a las industrias sancionadas, son afectados. Fue una práctica que, además, se extendió por todo el territorio nacional. Así que cualquiera que en esos años estuviera en activo, puede reclamar.

–¿Existe temor por parte de los afectados a ser represaliados por las industrias?

–Sí, hay ganaderos que temen quedarse sin una parte fundamental de su actividad. Sin embargo, les digo que es fácil represaliar a uno, pero cuando hablamos de doscientos... Ya no es tan fácil. Las empresas necesitan a los ganaderos, aunque quisieran dejar de comprarles no les saldría rentable. Y no hace falta reclamar contra una empresa concreta, vale contra el cártel.

–¿Existe una estimación de la cantidad que dejaron de ganar durante esos trece años?

–Aún no está cuantificado porque los peritos siguen trabajando en el informe, pero los cálculos es que hay una diferencia de tres céntimos por litro de leche vendida. Es mucho dinero.