SOCIEDAD

La escultura Mujer Chacinera, el homenaje a la mujer trabajadora, ya es una realidad en Noreña

La escultura se convertirá en imagen institucional del Condado

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Noreña salda su deuda con las mujeres chacineras

 

«Hoy saldamos una deuda histórica con una profesión arraigada en Noreña». Estas fueron las primeras palabras de la alcaldesa de Noreña, Amparo Antuña, durante el simbólico y emotivo acto de inauguración de la escultura Mujer Chacinera, con la que el concejo rinde su particular homenaje a la mujer trabajadora. Además de saldar la deuda «multiplicamos nuestro agradecimiento a la mujer trabajadora que desde hace más de un siglo desempeñó en Noreña, en nuestra industria chacinera, una labor encomiable al incorporarse en las entonces incipientes fábricas artesanales de la cárnica muestra iba desapareciendo la otra industria, la zapatera que tanta fama nos dio», aseguró. 

La propia alcaldesa, ayudada por muchas de las mujeres noreñenses que desempeñaron el oficio, fue la encargada de descubrir la escultura de «la moza chacinera», como la calificó el autor, el escultor José Luis Iglesias Luelmo, «que desde hoy y para siempre recordará a tantas mujeres que trabajaron en tan noble oficio» apostilló.

Los aplausos de los vecinos allí congregados, mujeres y hombres que pertenecieron al sector, dieron la aprobación a la escultura. "Que guapa" fue la opinión unánime. Los elementos típicos de las chacineras, especialmente el pañuelo con el que se protegían el cuello del bramante para atar los chorizos, no faltan en la obra de Luelmo, quien reconoció que vivir un día «muy feliz», en el que declaró su amor por la villa chacinera, «te quiero Noreña porque por sexta vez me llamaste escultor». También agradeció la implicación del Ayuntamiento, «desde el momento que presenté mi idea, la alcaldesa se enamoró de ella», aseguró Luelmo.

La escultura se asienta en el centro de la villa, en la Avenida de Flórez Estrada, desde la que contemplará el día a día del pueblo. Además, la escultura se convertirá en imagen institucional del concejo, sumándose a la Torre del Reloj.

 

La alcaldesa y mujeres chacineras de la villa fueron las encargadas de descubrir la escultura

 

La alcaldesa confía que la escultura «marque un antes y un después manifestando esa gratitud que les debemos a nuestros familiares». Más de uno ve en ella a sus madres o abuelas. Sin ir más lejos, la propia alcaldesa a su madre, por lo que aseguró que «pocas familias habrá en Noreña que no tuvieron a algún familiar involucrado en las fábricas».

El 11 de mayo será, desde hoy, un día especial para los vecinos de Noreña  porque «se rinde un sentido homenaje a las mujeres que desde finales del siglo XIX vinieron y vienen poniendo a la industria cárnica noreñense en el mapa», señaló la edil de Cultura, Pilar Cuesta, para la que esta escultura tiene nombre propio «el de mi abuela Sara». 

 

El autor, José Luis Iglesias Luelmo, durante su intervención

 

A principios del siglo XX, la industria cárnica comenzó a ganar terreno en Noreña. Las mujeres fueron las encargadas, entre otras faenas, de dar salida a toda la producción. Acudían en grupos cargadas con sus maniegas a todos los mercados de la provincia.

La escultura sale adelante con la colaboración de entidades, empresas, bancos y personas - ASINCAR, Juntamar, Caja Rural, La Carmina y Juan Roces- entre otros que prefieron mantenerse en el anonimato. 

Como muestra de agradecimiento, desde el Ayuntamiento se les entregó una lámina con la imagen de la escultura, y próximamente, les harán llegar una réplica en miniatura.

Luelmo y Sabino Albino Suárez, quien aporta unas líneas a este noble oficio en Noreña, durante la presentación

 

Los colaboradores de la iniciativa recibieron una lámina en el Ayuntamiento.