PONGA

PSOE y PP desenmascaran al exalcalde pongueto Cándido Vega, que podría terminar otra vez ante el juez

Cándido Vega y Mercedes Traviesa percibieron 70.000 euros en dietas, además del sueldo

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Vecinos de Ponga llenaron el viernes el Salón de Plenos del Ayuntamiento, donde se vivió una sesión en la que el PSOE y el PP, que gobiernan en coalición, aprobaron solicitar una auditoría a la Sindicatura de Cuentas, para poner negro sobre blanco la situación económica que han heredado después de ocho años de gobiernos de los foristas Cándido Vega –hasta que fue inhabilitado tras ser condenado por prevaricación, desobediencia y delitos medioambientales– y su sucesora Mercedes Traviesa.

Los grupos municipales del PSOE y el PP votaron a favor de pedir esta auditoría desde el año 2007 al 2015, lo que abarcaría las dos legislaturas de gobiernos foristas. Foro se abstuvo y no votó a favor de impulsar la auditoría; la portavoz y esposa de Cándido Vega, Menchu Sánchez,  justificó su abstención apuntando que «estaríamos de acuerdo si la auditoría se hiciese desde el año 2003 y no solo a partir de 2007». El Gobierno Local solicita esta auditoría a la Sindicatura de Cuentas porque, «aunque nos gustaría que la hiciese una empresa externa, esto supondría 25.000 euros, a los que no podemos hacer frente».

Una deuda que rondaría los 1,7 millones de euros
La alcaldesa de Ponga, la socialista Marta Alonso, justificó la necesidad de auditar las cuentas del Ayuntamiento, «por todas las irregularidades que nos estamos encontrado y eso que aún no hemos podido analizar toda la documentación y todas las facturas. De momento la deuda del Ayuntamiento asciende a más de 1,5 millones de euros, pero seguro que la cifra se incrementará cuando consigamos aclarar todo lo que aun está pendiente».
Alonso detalló el viernes un sin fin de irregularidades detectadas que habrían protagonizado en los últimos ocho años, con Cándido Vega y Mercedes Traviesa en la Alcaldía, «la gran mentira de ambos», apuntó la alcaldesa, que cuenta con un informe de la Secretaria, que avala lo que denuncia el Gobierno Local, del que también forma parte el edil del PP, Ángel Castañón.
Cuando Cándido Vega llegó a la Alcaldía en junio de 2007, encabezando la candidatura de URAS-PAS, se encontró en las arcas municipales, del anterior gobierno socialista, 565.807,26, llegando en el mes de julio a tener 750.000 euros.  «Un año y medio después, el 31 de diciembre de 2008, ya había 114.028,41 euros, contando además que anualmente hay una serie de ingresos fijos en el Ayuntamiento (canon cinegético, impuestos, fondo de cooperación, etc.). El 31 de diciembre de 2009, el saldo era de 34.499,51 euros. Finalmente, la debacle se hace evidente cuando en octubre de 2010 se refleja un saldo negativo (números rojos) de –1,187,53. Y esto sin llevarse a cabo ningún tipo de obra nueva, que no estuviese planificada», aseguró la alcaldesa.
Lejos de enderezar el rumbo, la cosa se fue poniendo mucho peor porque, «como apunta la Secretaria en su informe,  no contamos con suficientes ingresos para hacer frente a las obligaciones como el pago a proveedores, una deuda que estimamos se produjo desde 2009 a 2012, ya que antes de 2009 había crédito suficiente como para hacer frente a las facturas» apuntó la alcaldesa.
En los años 2012 y 2013, el Ayuntamiento de Ponga se acogió a esos créditos para poder pagar las facturas. La deuda por el pago a proveedores asciende aproximadamente a  1.000.000 euros, los cuales suponen al Ayuntamiento pagos de entre 20.000 euros y 30.000 euros al mes hasta el año 2023. «De momento hay una moratoria hasta agosto del año que viene, ya que si no teníamos que haber hecho frente a estos pagos desde el mes de agosto pasado».
Sumando el pago a proveedores, la deuda de 2014, la de años anteriores y las facturas impagadas de 2015, la deuda ascendería  a 1.563.000 euros. Pero el equipo de gobierno cree que la cifra se incrementará «a medida que sigamos esclareciendo la documentación».

70.000 euros en dietas
La documentación que estudia la Secretaria está sacando a la luz curiosidades como los 100.000 euros invertidos en la bolera de Viboli, «de lo que ni hay expediente, ni tampoco hay bolera, porque allí no se hizo nada», citó la alcaldesa; la domiciliación bancaria en la cuenta del Ayuntamiento de recibos de teléfono a nombre de una empresa llamada PAVIASTUR, «que se pagaban con dinero de todos los ponguetos», inquirió Alonso; los 70.000 euros que cobraron en dietas a lo largo de los años Cándido Vega y Mercedes Traviesa, «en kilometrajes, comidas o restaurantes de alto estanding, cuando percibían un sueldo de catorce pagas de 1.400 euros y, a diferencia de nosotros, ellos tenían a su disposición un vehículo municipal». La alcaldesa aseguró que «hubo meses en los que pasaban hasta 4.000 euros en dietas».
En la contabilidad municipal también aparecen las órdenes de pago de las minutas de los abogados que defendieron a Cándido Vega en el juicio que perdió y por lo que fue inhabilitado, transporte de vecinos en taxi a los juicios y comidas, que se pagaron con el dinero de los ponguetos. «Se pagó –recordó la alcaldesa– aunque había un acuerdo plenario y una serie de reparos de Intervención donde se especifica que el Ayuntamiento no podía hacerse cargo de este tipo de gastos».
También son llamativos los gastos de teléfono, ya que hay alguna factura de Vega por importe de 820,41 euros en el 2008 ó de 209,88 en el 2010, «cuando el saldo en la cuenta del Ayuntamiento era de tan solo 1.036,46 euros», apuntó la alcaldesa
En los últimos ocho años el Ayuntamiento llevó a cabo obras sin los pertinentes trámites administrativos como la realización de proyectos, la petición de los permisos necesarios a las administraciones pertinentes, y el proceso de adjudicación de la obra. Entre los ejemplos que destaca el Gobierno pongueto está la pista de Biores, donde se habrían gastado más de 100.000 euros, y no hay expediente alguno de contratación al respecto ni de trámite administrativo, como establece la Ley para obras con ese presupuesto; o el camino que une el barrio de Les Paraes con la carretera principal en el pueblo de Viegu, para lo que  tampoco se ha realizado el trámite necesario.

Marta Alonso puso también de manifiesto la afición de los exalcaldes, «en especial, en la época del exalcalde inhabilitado Cándido Vega, por la compra de fincas sin criterio técnico, suponiendo un derroche para las maltrechas arcas municipales ya que no había ningún interés social para la compra, o al menos no hay justificación administrativa para ello y porque, además, en algunos casos ha supuesto un gasto extra en notarías y en otras no hay constancia ni de escrituras ni del registro de la propiedad a nombre del Ayuntamiento».

Personal contratado por decreto
Tampoco se salvan de las irregularidades las contrataciones hechas en los últimos ocho años por parte del Ayuntamiento. «En lo que respecta al personal, nos encontramos con trabajadores contratados por decreto a pesar de los informes negativos de intervención y trabajadores contratados para una función determinada y que al final han acabado asumiendo las funciones de un funcionario público» resumió la alcaldesa.
Con todo est, y una vez la Sindicatura de Cuentes lleve a cabo la auditoría desde el gobierno local de Ponga, no descartan que tanto Cándido Vega como  Mercedes Traviesa terminen delante de un juez.

Vega culpa a los «cuatro o cinco secretarios eventuales que no estaban muy preparados»

El exalcalde pongueto Cándido Vega salió al paso de las graves acusaciones del equipo de gobierno que forman PSOE y PP en Ponga, asegurando que no se ha llevado ni  un duro del Ayuntamiento y defendiendo su gestión «porque siempre trabajé por el pueblo de Ponga».
Vega acusó al gobierno pongueto de «vender humo» y de acusarle de manera infundada, «algo que se volverá en su contra».
El exedil defiende que en su etapa como alcalde hacía 3.000 kilómetros al mes y que se reunía con representantes del Principado, del Parque y del Ayuntamiento a los que invitaba a comer. También justificó el exalcalde que el Ayuntamiento corriese con los gastos de los viajes de los vecinos que se desplazaban hasta Oviedo para mostrarle su apoyo durante la celebración del juicio por el que finalmente resultó condenado por inhabilitación.
Respecto a lo que Vega califica como «posibles problemas burocráticos con el papeleo», el exedil culpa a los «cuatro o cinco secretarios eventuales que no estaban muy preparados» y que tuvo durante sus mandatos.
Cuando los actuales gestores de Ponga llegan al Ayuntamiento se encontraron sin funcionarios, ya que la plaza de Secretario-Interventor está sin cubrir desde hace tiempo, dado que nadie quería el puesto de Ponga al haber trascendido en el mundillo de los Secretarios «como se las gastan allí».

La portavoz de Foro y esposa de Cándido Vega, Menchu Sánchez, tuvo que escuchar el viernes la retahila de irregularidades que el PP y PSOE denuncian que su marido protagonizó mientras ostentó el cargo de alcalde.