LA POLA

Homenaje en Siero al deportista trasplantado José Luis Franco Fernández

Franco es campeón de España de tenis por parejas, subcampeón individual y subcampeón de papel en el IX Campeonato Nacional de Trasplantados.
El deportista, afincado en La Fresneda, reivindica visibilidad y apoyo desde las diferentes administraciones.

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Franco, ejemplo de vida y de superación

 

El deportista sierense, José Luis Franco Fernández, se colgó tres nuevas medallas en el IX Campeonato Nacional de Trasplantados, celebrado en la localidad gaditana de Sanlúcar de Barrameda. Franco es el actual campeón de España en tenis por parejas y subcampeón individual. La tercera medalla la consiguió en pádel, modalidad de la que también fue subcampeón de España. «Perdí dos finales, pero para perder las finales hay que llegar a ellas», aseguró Franco, para quien el deporte ha sido un sino en su vida. 

Hoy, jueves, el deportista fue recibido en el salón de plenos del Ayuntamiento de Siero. El alcalde, Ángel García, en nombre de toda la Corporación, quiso reconocer su tesón y su esfuerzo. Representantes de Foro, Somos e IU arroparon al tenista local, que quiere dar visibilidad a los deportistas trasplantados. Además, también reclama más apoyos y ayudas de las administraciones para poder competir. «Para participar en cualquier campeonato, incluso Europeo o del Mundo, sale todo de nuestro bolsillo», lamentó. El siguiente paso que quieren dar los deportistas trasplantados es contar con una Federación para que tengan las mismas oportunidades.

Cepi entrega una placa de reconocimiento al deportista.

«La mejor receta es hacer deporte», abogó. Franco lleva una vida totalmente normal después de haberle trasplantado los pulmones, «soy un transplantado bipulmonar» apuntó. Con 24 años, tras desarrollar la enfermedad de fibrosis quística «de la que me decían que era portador y que no iba a desarrollar», tuvo que irse a Valencia para ser tratado. De esto ya hace 20 años. Pero al mes de ser operado «murió mi padre y tuve que venir a hacerme cargo del negocio familiar», recordó. Desde entonces su calidad de vida fue en aumento porque «subir las escaleras era algo impensable», puntualizó. 

El deporte es el gran motor en su vida. A los seis años comenzó a jugar al tenis en Avilés, de donde es natural y donde continúa entrenando: «todos los días, una hora y media».

Practica deporte y lo hace a alto nivel. Los nuevos logros deportivos vienen a incrementar su abultado palmarés deportivo (en el año 2006 fue campeón de Europa de deportistas trasplantados en Hungría).