SOCIEDAD

Santa Apología de Leceñes, dos décadas de celebración en familia

El fin de fiesta a la celebración será el viernes 7 de septiembre con la jira campestre. Además, durante toda la semana en el entorno de la Casona se podrá disfrutar de las tardes de juegos infantiles y las noches de la Casona con monólogos y diferen

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Fiesta en Leceñes hasta el viernes 7 de septiembre

 

Un año más, y ya son veinte,  Leceñes (Siero) escribió un nuevo capítulo de su celebración en honor a Santa Apolonia. Han pasado dos décadas  desde que un grupo de vecinos, muchos muy jóvenes, se animasen a recuperar la celebración que se ha convertido en un punto de encuentro y reencuentro para muchos vecinos,  una celebración muy familiar.

A las tres de la tarde comenzaron a servir la comida: un menú muy asturiano, fabada y arroz con leche que se mantiene desde su recuperación. «Los primeros años les fabes les cocinaba Lorenzo, el de Santolaya», explicó José Ángel Rodríguez, quien ahora elabora les fabes junto a Canor. Después «continuaron un grupo de madres de gente vinculada a la celebración hasta que comenzamos nosotros», recordó. Quien no falla desde la primera celebración es la repostera Carmina Vega encargada de endulzar la jornada con el arroz con leche. 

Los encargados de que la fabada estuvise en su punto y llegase a todos los comensales.

Este año se cocinaron 52 kilos de fabes, que se repartieron en ocho potes, para cerca de 300 comensales apuntados a los que se suma los miembros de la comisión. El compango era de casa y como ya manda la tradición en Leceñes, les fabes ya se comienzan a preparar el viernes «echándoles a remojo», señaló Canor. El sábado continúan con mimo el proceso y «a las 7.30 de la mañana ya comenzamos a cocerlas». Tras siete horas a fuego lento las dejan reposar para servir de domingo. Y es que las de Santa Apolonia son fabes reposaes que como dicen son un manjar.

La celebración en Leceñes continua toda la semana con los juegos infantiles, a partir de las cinco de la tarde, y las noches de la Casona con monólogos, por lo que la diversión está garantizada. 

El fin de fiesta será el viernes, 7 de septiembre, con la gran merienda  a partir de las 21 horas. Las orquestas Vivians y Costa Norte amenizarán la noche y de madrugada se servirán fabada y chocolate con bizcochos para los romeros que más aguante tengan. «Desayunar fabada es una tradición que mantenemos desde que recuperamos las fiestas», señala Rodríguez.

A las tres de la tarde se comenzó a servir el tradicioal menú. 

 

Más de 300 comensales disfrutaron de la fabada en Leceñes.