OPINIÓN

La Gran Coalición

No es la primera vez que PSOE y PP pactan en el Parlamento asturiano

Ha vuelto a pasar. PSOE y PP ensayan en Asturies la gran coalición y esta semana han alcanzado un acuerdo para aprobar los presupuestos, la ley principal que cada Parlamento desarrolla anualmente. Es lo que desde Mayo demanda a nivel estatal Felipe González pero que Pedro Sánchez niega un día y sugiere al siguiente. No es la primera vez que PSOE y PP pactan en el Parlamento asturiano. Lo hicieron este verano con la nueva ley de la RTPA, para repartirse a partes iguales su consejo de administración. Apenas una semana después cancelaban la presencia de los portavoces de PODEMOS en las tertulias de esa cadena. Pactaron también la liquidación de Cajastur, donde el alcalde popular de Oviedo, Agustín Iglesias Caunedo, y el portavoz socialista gijonés Santiago Martínez Argüelles, se emplumaban 80.000 euros anuales mientras despedían trabajadores, desahuciaban familias, cerraban la obra social y cultural o estafaban a 10.000 familias con la deuda subordinada… ¡con la caja de ahorros que era de todos los asturianos! PP y PSOE gestionaron juntos los desvaríos de los fondos mineros y avalaron la locura del Musel en Gijón, con cerca de 1.000 millones de euros gastados en un puerto sin barcos. Lo dicen los eurodiputados de la formación de Pablo Iglesias: PP y PSOE votan juntos más del 70% de las veces en Bruselas, entre otras cosas para colocar a Arias Cañete como Comisario Europeo.

¿Por qué sucede esto en nuestra comunidad autónoma? Se denominó el Pacto de la Zoreda. La mitología política cuenta que habría existido una comida en el restaurante de la Zoreda, propiedad de unos constructores ligados al gobierno asturiano. En ese encuentro, entre otros, habrían asistido el presidente asturiano (entonces secretario general de la FSA) Javier Fernández y Gabino de Lorenzo (ex alcalde ovetense) y habrían acordado repartirse el pastel del poder en Asturies: el nivel autonómico para el PSOE, el Ayuntamiento de Oviedo para el PP. Eso explica por qué en el consistorio ovetense trabajaban hombres de confianza del ex dirigente socialista Fernández Villa o por qué el PP apenas hacía oposición en la Junta General. ¿Quieren eso sus votantes y militantes históricos? Lo dudo: Miran la situación con la misma incredulidad y desazón que cualquier ciudadano. Sólo en los últimos 15 días ha habido novedades en 5 nuevos casos de presunta corrupción o mala práxis donde PP y PSOE comparten por igual cuota de pantalla: Aquagest (PP y PSOE), caso Villa, ex alcalde socialista de Luarca, ex consejera socialista de Bienestar Social (con sus empresas facturando para tres de las obras más polémicas de Asturies: el Musel, el HUCA o el Montepío) y la ampliación del puerto del Musel. No quieren atajar la corrupción sino asegurar el silencio y enterrar sus miserias con el menor ruido posible.

Los pactos parlamentarios entre PP y PSOE en Asturies sólo anticipan lo que quieren que suceda a partir del próximo mes de Mayo. Un gran pacto de los partidos de la casta para evitar que nada cambie. Hay 2,3 millones de niños (el 27,5%) en riesgo de pobreza, a la par que crece un 27% el número de millonarios en los últimos 5 años. Javier Fernández ha inaugurado este otoño su segundo chalet en Somió, el barrio gijonés más exclusivo. El eurodiputado socialista asturiano Jonás Fernández, de 34 años, ganó 110.000 euros en 2013. Además tiene una casa en propiedad de casi 600.000 euros y un coche de 30.000 euros, que no menguarán con su actual sueldo público de 8.000 euros mensuales. Y es que nos gobierna el 1% más rico, el que ni sufre ni sufrirá la crisis.

Por eso tenemos que reconquistar una educación y sanidad de calidad, actuar ante la estafa de la cuota láctea (las preferentes del campo), evitar despidos de trabajadores en empresas como el Matadero de Noreña, reactivar el turismo o recuperar la gestión pública de servicios como el agua, donde la privatización sólo incrementó el precio de las facturas. Y es que el pacto de los partidos de la casta sólo lo frenaremos con una gran coalición de la buena gente.