José Castro, el juez instructor del caso Nóos, que terminó con Iñaki Urdangarín y la Infanta Cristina de Borbón en el banquillo de los acusados, está pasando unos días en la Comarca del Oriente de Asturias. Esta mañana, mientras el juez paseaba por Cangas de Onís se encontraba con el alcalde de Onís, José Manuel Abeledo, que le reconoció y ni corto ni perezoso se hacía un "selfie" con él.
El magistrado, titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Palma, volvió estos días a ser noticia tras abrir juicio oral contra el expresidente del Gobierno de Baleares, Jaume Matas (PP) por la contratación "a dedo", la elaboración de un anteproyecto de opera, por importe de 1,2 millones de euros, al arquitecto valenciano Santiago Calatrava.
La Fiscalía pide un año y tres meses de cárcel para el exmandatario balear por un delito de tráfico de influencias y diez años de inhabilitación por otro de prevaricación; y reclama el pago de 120.000 euros en responsabilidades civiles.
