La cancelación de las Carreras de Caballos Playa de Ribadesella, que tenían prevista su celebración el pasado Viernes Santo, fue un disgusto importante para la villa que podría tener solución el próximo otoño. Y es que será entonces cuando, presumiblemente, Santa Marina vuelva a convertirse en centro ecuestre. Un cambio de programación que, si bien podría parecer único, tiene un precedente en 2018 cuando el mal estado de la playa impidió su celebración.
Inicialmente se barajaba la opción de realizarlas en el puente de mayo. Un momento de buena afluencia turística en Ribadesella que, sin embargo, planteaba un problema similar al vivido ahora en Semana Santa. Como hace un mes, las mareas tampoco facilitarían su celebración. Una razón de peso para que el Ayuntamiento de Ribadesella quiera ir sobre seguro y prefiera aguardar a después del verano.
Todavía no están confirmadas las fechas ya que está todavía pendiente una reunión entre el Gobierno riosellano y el comité organizador. Pero algo está claro: Ribadesella no quiere renunciar a volver a disfrutar este año de esta prueba hípica tan espectacular como atractiva.
