Lo que empezó como una quema para favorecer el pasto y acabó en un incendio forestal en Llanes puede acabar con los huesos del ganadero en la cárcel. Esa es la intención de la Fiscalía del Principado de Asturias, que le acusa de un delito de incendio forestal.
La pena podría consistir en año y medio de prisión además de la accesoria de inhabitación para el derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de condena. Además la Fiscalía añade una multa económica que consistiría en 20 euros diarios durante 15 meses, con responsabilidad personal subsidiaria en caso de impago. Al margen de esto, se exige al acusado a indemnizar al Principado de Asturias con 455 euros, el coste de los gastos de extinción del incendio, además de otros 2.464 euros que es en lo que se estima el daño medioambiental que produjo.
Los hechos sucedieron el 4 de abril de 2020 cuando el acusado, un ganadero de concejo de Llanes, inició una quema en el paraje llanisco de Texeiu con vistas a regenerar el pasto y promover su regeneración. Sin embargo, el fuego se descontroló y acabó arrasando 12 hectáreas de matorral, zarzamora, helecho, tojo y pasto.
