Medio siglo del Benidorm de Piloña

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photo_camera 50 aniversario del Benidorm de Villamayor

Hotel Restaurante Benidorm

Piloña está de celebración. El hotel-restaurante “Benidorm” de Villamayor cumple medio siglo de existencia esta Nochevieja. Para celebrarlo, los actuales dueños Loli Rodríguez y Pepe Álvarez, prometen organizar a lo largo de 2020 actividades culturales y deportivas. En el programa no faltará un concierto de su hija, la cantante Candela Álvarez. “Es una forma de agradecer a los clientes su fidelidad en todo este tiempo”, resaltan los propietarios.

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Lola Acebal y Luis Rodríguez, fundadores de El Benidorm.

Fueron los padres de Loli, Luis Rodríguez “el maderista de Antrialgo” y Lola Acebal,  de Cuadroveña, quienes pusieron en marcha el negocio la noche del 31 de diciembre de 1969. En la reforma del local, que antes había sido un edificio multiusos en ruina, dejaron todos sus ahorros. La ubicación privilegiada del “Benidorm”, junto a la Nacional 634, sumado a su mobiliario vanguardista, lo convirtieron en un lugar de referencia a la hora de celebrar bodas y guateques. «El botellero de escayola estaba pintado de colores, las mesas eran de formica y había una máquina de discos, algo muy novedoso entonces. Además, los mejores grupos musicales de la época pasaron por la sala de fiestas que teníamos en el primer piso, donde también había una terraza exterior», explica Loli, que por aquel entonces era una niña.

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De pie, por la izquierda: Luis Rodríguez, “El Neniti”, Dulce Diego, Josefa Rodríguez y Gonzalo “El de la Cantina”. Sentados: Lola Acebal, Francisco Fernández, María Acebal e Isabel Pastrana, en los inicios del negocio, en 1970.

Un lustro después de la apertura el éxito se vio truncado por el fallecimiento del progenitor. La hermana de Loli, María Jesús y su marido, José Ramón Castaño, se pusieron con mucho esfuerzo y sacrificio al frente del restaurante, que se hizo famoso por la preparación de platos como la angula o el filete al queso. «Fuimos pioneros en hacer jornadas de la merluza”, cuenta Loli, que relaciona el éxito con el buen hacer entre fogones de su madre y de la cocinera Dulce Diego.

Tras fallecer Castaño, tomó el relevo detrás de la barra el marido de Loli, José Luis Álvarez, más conocido como “Pepe el del Benidorm”, con un socio, Manuel Roda. Con la llegada del nuevo milenio acometieron reformas para convertir las plantas superiores, que antes funcionaban como pensión, en un hotel. El resultado no pudo ser más positivo: cada mes se alojan en él los músicos internacionales que acuden a tocar al escenario de la asociación “Bocanegra” en Valles. Pero el “Benidorm” es mucho más que un refugio de cantantes. Es el templo de la baraja al que acude a diario más de un grupo de vecinos a echar la partida. «Por aquí pasaron muchos famosos pero son los clientes del día a día como cazadores, pescadores, ciclistas, moteros y montañeros los que hacen que este lugar sea tan especial», asevera Loli, que desde 2014 regenta el restaurante con su marido.

benidorm-50-aniversario-villamayor-01 Alaska y Mario también estuvieron en El Benidorm y se hicieron una foto de familia.

Una de las visitas más sonadas fue, sin duda, la de Julio Iglesias, que paró a tomar un café camino de Unquera, donde presentaba su disco “La vida sigue igual”. «Revolucionó a todo el pueblo. Y tuvimos más de un año sin lavar la taza que usó», asegura Loli.

Melendi, Alaska y Mario, Rodrigo Cuevas, Julio Anguita, Ismael Merlo y Vicky Lagos o Ana  Morgade son sólo algunas de las personalidades que se han dejado caer en estos cincuenta años por el “Benidorm”, que ha visto aumentar su popularidad desde que el año pasado un décimo del Gordo de la Lotería de Navidad se vendiera en el local piloñés.