Xata Roxa, empresa afincada en Noreña desde hace seis años, lleva más de dos meses sin pagar a sus 30 trabajadores y, actualmente acumula una deuda de más de 4 millones de euros. Ademas, desde la plantilla aseguran que, sin dar explicación ninguna, hace aproximadamente un mes que las instalaciones permanecen paradas, sin actividad productiva alguna.
Los operarios fueron recibidos ayer por los miembros de la corporación del Ayuntamiento de Noreña, que les ha mostrado su total apoyo. Amparo Antuña, alcaldesa de la localidad, ha asegurado que «nos tienen a su entera disposición e iremos con ellos a donde haga falta».
Las últimas noticias que les llegaron a sus empleados por parte de la empresa cárnica, fue «la decisión de llevar a cabo un despido colectivo», aunque, posteriormente «se echaron atrás y nos pidieron una semana de margen para comunicarnos una decisión en firme», indica el representante de los trabajadores. Plazo que se cumpliría este mismo viernes.
La empresa forma parte desde sus inicios de ASEAVA, quien ha tomado siempre las decisiones que afectaban a Xata Roxa. Es por eso que, desde la plantilla, instan a ASEAVA a que «solucione la situación por la que están pasando trabajadores y familias y que les dote de carga de trabajo para poder seguir manteniendo la actividad».