Los amantes de las rutas de montaña, el senderismo y el contacto con la naturaleza que disfrutan de un buen rato entre amigos y familia al aire libre, en entornos y paisajes con vistas al mar, pueden estar seguros que en Llanes encontrarán uno de los rincones con mayores posibilidades, variedad y riqueza natural para practicar su hobbie favorito. Estas son cinco rutas que, por las prestigiosas vistas que ofrecen y el entorno en el que se encuentran no dejarán a nadie indiferente.
1. Playa de San Antolín-Playa de Guadamía
Esta ruta costera de casi 16 kilómetros de distancia tiene el punto de partida, como su propio nombre indica, en la Playa de San Antolín a unos 16 kilómetros de la localidad llanisca (siguiendo la carretera A-8). Tomando como referencia inicial la línea de FEVE, se toma una desviación hacia la derecha que dirige hacia una de las playas más emblemáticas y peculiares del concejo de Llanes y de Asturias:la playa de Gulpiyuri. Considerada un Monumento Natural, es una de las pocas playas interiores que hay en Asturias, originada por la erosión del mar bajo los riscos y acantilados de la zona.
Continuando el trayecto, se pueden apreciar elementos como la capilla de Santolaya y, más adelante, la Playa de la Guelga. El recorrido sigue hacia el pueblo de Hontorio, sin ignorar en el camino lugares prestigiosos como el puente que atraviesa el rio Llagaras. Dejando atrás Hontoria, se realiza una breve subida o ascenso hacia los Collaos para divisar la popular capilla de San Antonio o la playa de Cuevas. Rodeando las carretera Ovio y Picones, se puede realizar un breve descenso hacia la propia playa de Cuevas, un rincón donde tomar un breve receso, comer un tentempié o, simplemente, admirar las vistas del lugar.
A mayores, las vistas pueden ser aún más privilegiadas si se continúa el trayecto hacia los bufones de Pría, donde imponentes acantilados toman el absoluto poder de la zona, consagrándose como los grandes protagonistas visuales. Aún así, si ya se ha visitado previamente estos auténticos fenómenos naturales, se puede optar por seguir el camino de la playa de Cuevas hasta encontrar el río Nueva y realizar un ascenso hacia Villanueva. En este momento, el sendero mostrará rincones y lugares de lo más especiales como un estanque, la capilla de Garaña y un área recreativa, otro sitio que puede servir para tomar un segundo descanso a aquellos que lo necesiten.
El tramo final de la ruta irá cogiendo forma al atravesar Garaña, pasando por Llames de Pría para alcanzar un camino, que tomando la bifurcación hacia la derecha, conducirá hacia los famosos bufones. El último empujón vendrá al tomar el desvío hacia la izquierda que concluirá en el final del trayecto: al principio, el río Guadamía, para llegar, finalmente, al final de nuestro destino: la playa homónima: Guadamía. Esta ruta puede ser una opción apetecible para las personas que disfruten de un senderismo costero, tranquilo, con buenas vistas y aquellos que quieran pasar un día de desconexión en la naturaleza, con niños e, incluso con mascotas. Además, este recorrido puede llevarse a cabo en una sola mañana o tarde, ya que el tiempo aproximado de realización ronda las cuatro horas, en función del ritmo y rendimiento que se lleve.
2. Camín Encantau
Una de las mejores opciones para hacer con niños debido a su encanto, peculiaridad, magia y, sobre todo, mucha mitología. La tradición, cultura e identidad asturiana convergen en un sendero lleno de secretos que podrás descubrir introduciéndote en la frondosidad de sus bosques y la riqueza de su fauna y flora. Es una de las rutas más populares del concejo llanisco y de Asturias, ¿te atreves a descubrirla?
Con una distancia aproximada de diez kilómetros, el recorrido de esta ruta circular comenzará en la Venta El Pobre, pasando por Comezán, Malatería hasta llegar a Ardisana, para continuar por Ríocaliente y llegar, de nuevo a la Venta El Pobre. Por el camino, también se pueden observar localidades como Posada de Llanes, Vibañu o Puente Nuevo. No hay que olvidar que en el trayecto se descubrirán maravillas como el valle de Ardisana, la sierra del Cuera, los hórreos de Ríocaliente o la iglesia de Santa Eulalia, que data del siglo XIII. Por otro lado, no se puede ignorar otros rincones emblemáticos de la zona como la casa de los Posada, la casona del Corajarrieru o de los Arnero, con una antigüedad de entre cuatro y cinco siglos.
A pesar del entorno, el enclave y el paraje natural tan rico y variado que puede descubrirse en esta ruta, es importante destacar una de las peculiaridades que hace de este recorrido un sendero único y especial: las esculturas (la mayoría talladas a madera) de los personajes tradicionales y mitológicos que forman parte del ideario popular asturiano. Así es como, el Nuberu, el dios de las lluvias y las tormentas, nos sorprende con su aspecto malhumorado, los trasgos con su picardía y astucia y el Sumiciu que se encarga de aconsejar a los senderistas que revisen sus objetos personales. No nos podemos olvidar, tampoco del hombre del sacu, ese personaje que ha provocado algunas de las mayores pesadillas y terrores nocturnos de los más pequeños de la casa, pero que en esta ruta se presenta algo más pacífico y amigable.
Originario de los mares, aparece el Pataricu con su único ojo, y la lavandera o la castañera que encarnan esa tradición y costumbrismo asturiano en la aldea. A su vez, el Diañu Burlón, con su aspecto camaleónico capaz de cambiar de imagen a su antojo y el magnífico guardián de los bosques asturianos: el Busgosu son algunos de los seres mitológicos favoritos de los visitantes, Por último, también podemos encontrar al personaje más emblemático de la mitología asturiana: el Cuélebre, un dragón protector de los tesoros. Aunque no sea algo mitológico, es necesario destacar la Cruz de los Garabiales del siglo XVIII con un fuerte arraigo y simbología de la muerte y la espiritualidad.
3. Ruta costera de Llanes a Celorio
En ocasiones parece que para poder realizar una ruta en condiciones es necesario desplazarse en coche de los centros urbanos, pero esta es una opción perfecta si no se quiere coger ningún vehículo ni transporte público, ya que el punto de partida se encuentra en el centro urbano de la localidad llanisca.
El recorrido partirá del corazón de Llanes en el Paseo San Pedro, concretamente en la playa de El Sablón. Tomando la dirección oeste de la localidad hacia Poo, se atraviesa la zona denominada “Malzapato”, por un sendero desde el cual se pueden divisar las joyas de la zona como la Atal, la punta de Xarri y las populares explanadas de Los Jorcaos. El sendero adquiere su parte más ferroviaria al contemplar la vía del tren, detrás de la cual se observan las emblemáticas sierras del Cuera y de la Borbolla. El recorrido continúa unos tres kilómetros hasta llegar a los acantilados de Alburri.
A continuación, en las proximidades de Poo, se puede efectuar la primera parada para admirar la playa de la propia localidad, considerada una de las más asombrosas del concejo de Llanes, En este momento, el recorrido conduce hacia el río La Vallina y efectuando un breve ascenso se pueden apreciar a la perfección los castros de Poo, Pelau, San Martín y Amielles.
Llegando ya hacia el final del trayecto, será necesario recorrer el sendero hasta llegar, aproximadamente, al punto kilométrico número seis para alcanzar la Boriza e ir recorriendo, lentamente, el descenso hacia la localidad de Celorio. Este punto de la ruta será el momento perfecto para descubrir absolutas joyas del patrimonio asturiano como el monasterio de San Salvador, que data del siglo XI, habitado por monjes benedictinos y, en la actualidad, por la orden religiosa jesuita. Tras este breve acercamiento histórico, se continúa casi un kilómetro más hasta llegar al final del trayecto: la espectacular playa de Las Cámaras. Para regresar a Llanes, se puede llevar a cabo el trayecto inverso, o bien tomar el tren en la localidad celoriana. Es una ruta perfecta para los amantes de la costa y qué mejor oportunidad que esta para descubrir los rincones de la costa asturiana.
4. Subida al Picu Benzúa
Tras haber mencionado un par de rutas de rasgos costeros y marítimos, pasamos a una de alta montaña, para los auténticos montañeros. Para esta ruta se pueden tomar varios puntos de partida: el pueblo de Los Carriles, la Venta el Pobre o el Alto del Torno. Aun así, Los Carriles será el punto de inicio que tomaremos como referencia (a 200 metros de altitud).
Este pueblo, ubicado a 20 kilómetros de la localidad de Llanes, es idóneo para dejar el coche y comenzar el trayecto. El siguiente pueblo que se visitará será Doradiellu, donde se deja atrás el cómodo asfalto y nos introducimos en un terreno de sendero de montaña. El ascenso comienza y uno de los primeros lugares reseñables de la ruta llegará a los 469 metros de altitud: Pozu los Alloros. Este punto puede ser un buen momento para tomar un breve respiro de la subida: hidratarse, comer algo o sacar unas fotos al lugar, etc.
Una vez terminado el receso, se efectuará un pequeño cambio de vertiente para ascender en forma de zig zag; será inevitable recurrir a las manos para subir algún escalón debido a la pendiente empinada que puede encontrarse en esa zona del Benzúa. La parte final de la ruta llegará al pasar por una zona de praderas, que si tienes la suerte de verlas en primavera y verano brillarán por su intenso color verde. Más adelante, en el último repecho se puede divisar la cima de esta montaña llanisca a unos a una altura de unos 720 metros (723 concretamente). Aunque es importante mencionar que el terreno dificulta poder ascender los últimos 20 metros de pendiente. Por ello, si la ruta se realiza con niños, habrá que prestar atención a este factor. Siguiendo nuestros pasos en dirección inversa se podrá llegar al punto de partida de la ruta.
Se puede destacar el enorme significado histórico que tiene esta ruta, sobre todo, en la época de la Guerra Civil al albergar restos de trincheras y los refugios excavados en la roca, del bando republicano. Por lo que, aquellos que tengan interés en la historia, descubrirán que esta ruta guarda esos elementos históricos en su recorrido.
5. Ruta de Unquera a Llanes
La más larga de la lista, este trayecto pertenece al emblemático camino de Santiago. Tiene una peculiaridad y es que, su inicio se encuentra en Unquera, una localidad cántabra situada a unos 25 kilómetros de Llanes. Este recorrido no alberga grandes dificultades en su terreno, ni tiene excesivos cambios de nivel o de alturas, pero sí que, debido a su distancia y duración, puede ser la menos aconsejable para hacer con niños.
Saliendo de Unquera, se toma la dirección hacia el río Cares-Deva para entrar en Bustio, que ya forma parte de suelo asturiano. Antes de llegar a Colombres, el siguiente pueblo que nos encontraremos en la ruta, se pasa por la Cuenta del Canto. En Colombres, se pueden apreciar monumentos como la Iglesia de Santa María, las casas de Indianos. El siguiente paso será cruzar la carretera N-634, aproximadamente a la altura del pueblo de El Peral. Otras localidades asturianas representativas del oriente asturiano aparecerán a lo largo del trayecto: la ruta costera de La Franca o los Cándanos, además de poder contemplar fenómenos naturales como el río Cabra que separa los concejos de Ribadedeva y Llanes.
Continuando por un desvío que se desplaza hacia la izquierda, dirección a la Sierra de Borbolla, se llega a Buelna, mediante la carretera N-634. Es en este momento, cuando el recorrido se transforma en un absoluto mirador de la costa asturiana, con prestigiosas vistas a las ruinas del Palacio de Santa Engracia, Puertas de Vidiago, etc. Otro de los puntos emblemáticos que pueden avistarse en esta ruta son el río Purón, rodeado de bosque, vegetación y naturaleza.
San Roque del Acebal es otra de las localidades más llamativas del recorrido y del propio Camino de Santiago desde la cual puede accederse a las casas de Ortiz para llegar al Collado de la Jornada y descubrir una maravilla arquitectónica llena de cultura e identidad: Capilla del Cristo del Camino. En el trayecto final, será necesario efectuar una breve bajada hacia una carretera local y el albergue de Portilla, enlazando el trayecto a la carretera AS-263 hasta llegar al final del recorrido: el núcleo urbano de Llanes.
A pesar de que esta ruta se adscriba al itinerario del Camino de Santiago, se puede llevar a cabo de forma independiente y autónoma, pero las referencias a la peregrinación son múltiples y quien sabe, puede que esta etapa sea un aliciente para algún senderista, animándose a llevar a cabo el camino completo.
