Opinión

Diego Canga Fano, un político diferente

Conozco al señor Canga no muy profundamente. Confieso que por diversos medios intenté conocerlo más, así como a su segundo –este ya profesional de la política– Álvaro Queipo Somoano, apellidos muy ligados a Cangas de Onís.

Seguramente soy poca cosa para ellos, lo cual pasa muy corrientemente con la gente mayor. Solemos ser un estorbo para muchos despistados, que luego echan arengas varias sobre los vieyos como el que esto escribe. En Asturias somos la gran mayoría de votantes, encima los políticos saben de sobra que los jóvenes pasan del tinglado de las urnas. Los políticos se pasan todos los meses pagando dinerales para  que les hagan encuestas. Supongo que tales asuntos los pagarán con nuestro dinero. Un político generalmente cree que el dinero que administra es suyo. De ahí que hasta la Guardia Civil ande por la trena, como anduvieron Mario Conde o Rodrigo Rato o Bárcenas por citar ejemplos muy conocidos. Pues no moninos políticos: el dinero público no es vuestro, aunque sabemos de sobra cómo lo administráis.

Lo que vaya a hacer después de las elecciones, es cosa de él, aunque supongo que un señor con tanta preparación y puesto de alto funcionario en la UE, retornará a su puesto de trabajo, desde donde no me cabe la menor duda que como siempre lo hizo a través de Asturias XXI, seguirá ayudando a su tierrina

Diego Canga no es un político, es un ejecutivo de la Unión Europea, metido a político. A sus 58 años (diez menos que yo), este alto funcionario de la Unión Europea, renuncia a su actual sueldo en el entorno de 300.000 euros anuales, para volver a trabajar por su tierra como Presidente del Principado, con un sueldo de unos 80.000 euros anuales.

Solo por ese dato he de escribir que me produce el mayor de los respetos. Andar de aquí para allá, en ferias de ganado, mercados de todo tipo y echando arengas por mil sitios, no es tarea a la que esté acostumbrado. Gracias a su esfuerzo, trabajo y tesón obtuvo un puesto de alto funcionario en la UE, cuestión poco sencilla.

Y eso que poca gente lo valora, uno lo pone en gran valor. He de reconocer que en esto de la comunicación no le puedo dar ni un 5, pero es muy listo y pronto aprenderá.

Así que le expreso como Asturiano mi máxima gratitud por su abnegada labor en pro de Asturias. La mayoría de la gente que se mueve en la política es por dinero y el señor Canga, lucha por Asturias, no por el dinero y eso nos está demostrando.

Lo que vaya a hacer después de las elecciones, es cosa de él, aunque supongo que un señor con tanta preparación y puesto de alto funcionario en la UE, retornará a su puesto de trabajo, desde donde no me cabe la menor duda que como siempre lo hizo a través de Asturias XXI, seguirá ayudando a su tierrina. Desde luego, lo que podrá aportar a Asturias como diputado en la Junta, será sin duda muy inferior a lo que podría hacer desde la UE.

Y si se quedará, en caso de perder las elecciones –muy probable–  me dará pie para otro artículo que podría titularlo el “Caritativo Canga”.

Señor Canga, aunque usted me obvie, le deseo la mayor suerte del mundo para que gane al socialista  Barbón. Y ya estorbo poco. Y los profesionales de la política saben que un periodista jubilado estorba poco. Y si no me creen amadísimos parroquianos –con los que me reecuentro–, pregúnteselo al veterano profesional de la política, Isidro Fernández Rozada, a quien saludé con motivo del tristísimo entierro de Pepín, el hijo de Toni Pérez Prieto el que fue el mejor alcalde de Cabrales, junto con el asesinado Arturo Coro.

Amigo Toni

Toni Pérez Prieto perdió a su hijo Pepín la semana pasada. El pobre chaval estuvo luchando un año en el hospital y cuando parecía que llegaba la luz después de tanto sufrimiento, la luz se fumó. Se que lo sientes Toni y Rosa tu mujer. A mi me pasó lo mismo hace 20 años y nunca me podré olvidar de todas tus atenciones en momentos como el que ahora te toca pasar. La vida sigue Toni y a pesar de esa gran putada, no queda otra que luchar por toda tu familia.