Opinión

Estamos de aniversario en el Hospital Grande Covián

El jueves y, en el Parador de Cangas de Onís – porque en Arriondas en décadas no fueron capaces de tener un auditorio decente– se celebra el 25 aniversario del Hospital Grande Covián, sito en Arriondas y fruto de la visión política del mejor alcalde del Concejo en toda la democracia. Manuel Alonso Nieda vio la jugada y desde Oviedo, Cangas de Onís, Ribadesella y otros, le pusieron todas las zancadillas del mundo y alguna más, para que Arriondas no tuviera la mayor empresa de toda la Comarca. Nieda, que es un gran ganadero metido a político, en su etapa en el PSOE de aquel entonces –ni por asomo ningún parecido con el actual –, tuvo que luchar durante su primera legislatura del año 1983 al 1987, para poder comprar los terrenos del embrión del Hospital Grande Covián que hoy celebra sus bodas de plata, y echarlo a andar paulatinamente.

Otro de los pilares básicos de la Sanidad en nuestra Comarca, el ATS Jesús Longinos Menéndez, que fue el primer jefe de enfermería del Policlínico de Arriondas y director del área VI

Alonso Nieda, conocido en el concejo como Manolo Mesariegos, era y es un hombre de izquierdas de verdad, la mayoría de los de ahora son sucedáneos de poco valor añadido. Él estaba en un PSOE comprometido con la ciudadanía, con dar lo mejor para los que menos tenían y en hacer cosas tan grandes, como pasar de un pequeño consultorio médico “dirigido” con singular destreza por una excelente enfermera,  María Lucinda Muñiz (Mayayu), pongueta de nacimiento, pero afincada en Parres. Aquel era un local pequeño y a cualquier enfermedad complicada te mandaban para Oviedo. Los taxis, trenes y autobuses, era lo que tenías, para ir a ver a tus familiares (por cierto, décadas después y gracias a las excelentes gestiones de los mandantes actuales tarda unos 20 minutos más en llegar). Alonso Nieda era muy querido, pero la derecha toleraba mal que la izquierda ocupara cuotas de poder que talmente parecía eran solo para los sucesores del Franquismo. Ahora y décadas después, seguimos con el mismo soniquete. También es cierto, que aquel PSOE de Manolo Mesariegos y, repito una vez más, nada tenía ni tiene que ver con el actual para nuestra desgracia.

Me pierdo y me centro en el asunto hospitalario, no sin antes olvidarme de otro de los pilares básicos de la Sanidad en nuestra Comarca, el ATS Jesús Longinos Menéndez, que fue el primer jefe de enfermería del Policlínico de Arriondas y director del área VI. Era entonces Consejero de Sanidad Juan Luis Rodríguez Vigil (el del Petromocho) y Longinos venía de La Residencia Sanitaria Covadonga de Oviedo donde era supervisor de Urgencias.

Ese Policlínico estaba blindado a las inundaciones, porque Manuel Alonso Nieda era de Arriondas y sabía de sobra que esa zona cada equis tiempo se inundaba. Pero luego llegaron los Arquitectos y demás técnicos de Madrid. Y como eran tan listos, pusieron en la planta baja del hoy Hospital Grande Covián todo lo que se les ocurrió y un poco más. Claro está, que el alcalde de Parres en aquel entonces era de Laviana (tierra que da mucho político singular) y no tenía ni idea de lo que luego pasaría. El Policlínico estaba construido en alto porque la gente de aquí sabía lo que pasaba. Millán seguramente ni lo sabía, ni se interesó por ello. Así nos fue. Si Nieda fue el mejor alcalde de Parres con diferencia abismal, Millán, que en paz descanse, fue el polo opuesto durante sus 20 años de reinado

Este hospital lo inauguró el ministro del PP, Romay Becaría, junto con el Secretario General de Asistencia Sanitaria  Alberto Núñez Feijóo, que a día de hoy sigue en el machito de la política.

Muchos fueron los que lucharon para que este Hospital estuviera en pie y mucho escribió uno para hacer comprender a la población, el gran hospital que teníamos y tenemos, de momento. No están los capitalinos gobernantes muy por la labor de que nuestro Hospital siga siendo tan grande como lo es hoy. A poco que nos descuidemos nos lo irán quitando, por bobos y aplaudidores de golfos tipo el Rey Emérito Juan Carlos de Borbón.

Concluyo con algo FUNDAMENTAL:

Ojo a todos los ciudadanos de La Comarca. A la chita callando, nos pueden estar queriendo desmantelar esta imprescindible instalación Sanitaria.

Arriondas podría haber retenido en el pueblo a todo el capital humano del Hospital. Era bien sencillo:

En su día se hubiera hecho una urbanización para médicos en Santianes del Terrón y seguramente los médicos estarían encantados de vivir en Arriondas, y hubieran ayudado e influido para convertir el pueblo en una ciudad con gente preparada al frente. ¿Y ahora qué queda? Ya lo ven.  Y eso  pesar de tener la mayor empresa de la Comarca de los Picos de Europa. Estoy convencido que si Manuel Alonso Nieda hubiera aguantado otra legislatura más, así lo hubiera hecho. Pero claro, Nieda tiraba por su pueblo y a los gobernantes capitalinos les estorbaba. Marchó seguramente aburrido de ver a tanto golfo y arribista englobado en las filas del PSOE, y lo sucedieron otros que vivieron como monarcas sin hacer nada por el pueblo. Así nos va.

Es un triste espectáculo ver hacia las ocho de la mañana llegar coches con médicos desde Oviedo, a los que encima no les pagan kilometraje y, que en cuanto acaban su tarea vuelven a marchar. Qué valor añadido dejan en el pueblo: NADA. Si los siguientes alcaldes después de Alonso Nieda hubieran sido diligentes otro gallo nos cantaría.

Y sería un gran desagradecido, si antes de concluir este artículo de mi Hospital, me olvidara de una figura crucial para que el Hospital Grande Covian esté en pie. Antonio Trevín Lombán fue el gran artífice de buscar el “encaje” de este centro Hospitalario, cuestión nada sencilla. Porque fue él quien adjudicó el contrato para hacerlo; el encargado de poner la piedra junto con otras autoridades y el que nombró el primer Patronato para echarlo a andar con el doctor Buscarons al frente. Hoy su director es José Manuel Llera, que comenzó su andadura profesional en este Hospital que sigue y lucha por él, porque le pasa como a mi:

ES NUESTRO HOSPITAL