La Oficialidá
Amadísimos parroquianos, me veo otra vez en la imperiosa necesidad de echarles alguna arenga más de las previstas.
Al grano:
Agustín de Hipona, para los “curones” tipo el Obispón* San Agustín, escribía allá por los años 400 después de Cristo (en ese sí creo –señor Obispón– que usted se sirve de Él para vivir casi como Dios), repito, escribía esto:
“Si de los gobiernos quitamos la justicia, ¿en qué se convierten sino en bandas de criminales a gran escala? Y esas bandas ¿qué son sino reinos en pequeño? Son un grupo de hombres, se rigen por un jefe, se comprometen en pacto mutuo, reparten el botín según la ley por ellos aceptada. Supongamos que a esta cuadrilla se le van sumando nuevos grupos de bandidos y llega a crecer hasta ocupar posiciones, establecer cuarteles, tomar ciudades y someter pueblos. Abiertamente se autodenominan entonces reino, título que a todas luces les confiere no la ambición depuesta, sino la impunidad lograda. Con toda profundidad le respondió al célebre Alejandro un pirata caído prisionero, cuando el rey en persona le preguntó: ¿qué te parece tener el mar sometido a pillaje? Lo mismo que a ti, le respondió, el tener al mundo entero. Solamente que a mí, que trabajo en una ruin galera, me llaman bandido, y a ti, por hacerlo con toda una flota, te llaman emperador” ¿Les suena a algo?
Bable
El otro día hablando con un bablista de verdad, autor de libros y hasta obras de teatro en la nuesa llingua le espetaba:
– Mira, lo del Bable está muy bien, pero lo que de verdad subyace, lo que quiere parte de esta golfería política anteriormente expresada por el señor Hipota, son puestinos de trabayu a 2.000 euracos al mes para amigotes y conocidos.
– Probablemente tienes razón, Borja. (decía)
Me llama la atención la vehemencia e interés del Aragonés de Jaca, Daniel Ripa, doctor en Psicología y Ciencias del Trabajo por la Universidad de Oviedo. Hace tiempo que quedé con él (el Covid me invitó a la prudencia) y supongo que ahora con el asunto Covid más estabilizado nos verenos.
Él sabe de sobra que muchos de sus conocidos y amigos de Podemos –más o menos cualificados– encontraron “teta” en el mundo de la política.
Pues haciendo las cuentas del Gran Capitán, contando que tenemos 151 centros de enseñanza en Asturias, poniendo a un par de “enseñantes” del nuevo idioma a inventar por centro ya tenemos 300 nuevos enseñantes de no se sabe qué, hasta que otros 100 doctos lo normalicen (en Arriondas se dice fachu. En Cangas jachu y así tou). Ya vamos, por 300 puestinos, que a 2.000 euracos del ala cada mes, para amigos, conocidos y demás (eso sí: con oposición de por medio) 600.000 euracos mensuales, que en las pagas se duplican a 1.200.000 euracos.
Pues el Presidente Barbón, en una autonomía inviable, a gastar más y recaudar más impuestos. Y no le queda otra. En su programa electoral –que no lo leería ni el 2% de sus votantes–, venía lo del bable. Pues ya saben: más impuestos que se acercan para “suministrar” a amigotes y conocidos.
* Obispo de Oviedo. Un gran gallina que se esconde de periodistas, al ser preguntado por su lícita actuación como jefe de “me lo quedo”. Es decir: inmatriculaciones.
