Una comunidad de propietarios de Lastres pide una multa coercitiva de 1.000 euros mensuales para el alcalde Toyos

El ayuntamiento no ha ejecutado el desmontaje de la chimenea de un restaurante cuya licencia de obra fue anulada por el juzgado.
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photo_camera La chimenea del litigio, que el Ayuntamiento de Colunga está obligado a desmontar.

«Solicito que, teniendo por presentado este escrito, se sirva admitirlo y dictar resolución acordando imponer al alcalde de Colunga sucesivas multas coercitivas mensuales por importe de 1000 euros cada una, hasta que acredite la total demolición de la obra objeto de la licencia anulada». Así reza la solicitud presentada por el abogado de la comunidad de propietarios del edificio Elías Gallego de Lastres, en el juzgado de Villaviciosa, en vista de que se ha cumplido el plazo dado al ayuntamiento para retirar la chimenea instalada por un restaurante cuya licencia municipal se declaró nula.

La comunidad de propietarios va ahora contra el alcalde, José Ángel Toyos, porque la sentencia del 9 de septiembre de 2021 anuló la licencia de obra «para sustitución de conductos de ventilación de cocina y aseos para local comercial en la calle Matemático Pedrayes». Y la anulación comporta la obligatoria demolición de las obras.

El juzgado requirió al Ayuntamiento de Colunga, con fecha 25 de septiembre de 2023, a llevar a efecto la sentencia en el plazo de dos meses, algo que no se ha hecho, y es por eso que «transcurrido con creces el plazo concedido, el Ayuntamiento de Colunga no ha ejecutado la sentencia, no habiendo sido demolida la instalación ejecutada al amparo de la licencia anulada, y no constando siquiera que el Ayuntamiento de Colunga haya dictado resolución ordenando tal demolición» apunta el abogado que solicita la multa coercitiva para el alcalde. Pero la causa puede ir más allá si algún vecino decidiese llevar al alcalde a la vía penal.

Otro de los matices del caso es  la manifiesta estrecha amistad que existe entre el alcalde y el hostelero al que afecta la sentencia.

Con todos estos “condimentos”, EL FIELATO ha podido saber que las fuerzas de la oposición municipal, conocedores de los hechos, cuando menos estarían hablando de una posible reprobación del alcalde Toyos, aunque el temor es que la chimenea «termine convirtiéndose en una nuevo caso Pacoli, que nos vaya a costar a los vecinos otro dineral».