FOTOS El castro de Antrialgo sigue dando sorpresas
La tercera campaña de excavaciones en el castro de Antrialgo, que concluye este miércoles, 5 de agosto, está dando sus frutos. El equipo de arqueólogos que coordina Juan Ramón Muñiz ha encontrado una nueva cabaña de origen castreño a pocos metros de la localizada en 2019. Junto a esta última han identificado además un muro con base de piedra que en su día debió contar con una estructura de madera y ramajes destinados a mejorar y ampliar la protección del asentamiento, en el que también han aparecido varias piezas de cerámica de época castreña, romana y medieval.
Para divulgar las novedades de esta campaña -que como las dos anteriores ha sido financiado por el Ayuntamiento de Piloña- los investigadores organizan estos días visitas guiadas, previa reserva y con aforo limitado, que ya ha sido cubierto. El recorrido cuenta con tres paradas: la primera sobre la vía romana que fue localizada en la primera campaña, en 2018. La segunda en el prau La Torre en el que se identificaron varias construcciones defensivas antiguas. La última en la zona conocida como La Cabañona, donde se centran los dos sondeos practicados este año.
El historiador local José Antonio Longo, que se encargó de guiar la primera visita el sábado, 1 de agosto, insiste en la importancia del yacimiento piloñés, que recientemente ha sido incluido en el Inventario del Patrimonio Cultural de Asturias y cuenta con más de 10.000 metros cuadrados repartidos en varias fincas privadas. "No hay duda de que es un espacio estratégico que ha sido sucesivamente ocupado por distintos moradores porque desde aquí se controla toda la vega de Villamayor y la de Sevares", dijo. "Lo principal es que la gente del pueblo se sienta orgullosa de estos hallazgos, que lo sientan como suyos y poder dar continuidad a las investigaciones porque aportan mucha información de un periodo poco conocido", explicó al público asistente, la mayoría procedente de la región.
El equipo de la tercera campaña de excavaciones de Antrialgo ha estado compuesto, además de por Muñiz y Longo, por Adrián Piñán, Alex Sánchez, Irene Faza y la estudiante de arqueología María Rodríguez. "El apoyo de los vecinos y de la parroquia rural de Villamayor que se encarga de limpiar y acondicionar la zona para que podamos trabajar es fundamental", subrayan los historiadores.
