20 de mayo de 2016, 13:16
«Los ratones son el mayor enemigo de las pumaradas» asegura José Luis Vigón, de Sidra Orizón, que junto con otros productores ha encontrado en los burros el antídoto perfecto. «Los burros pisan fuerte y espantan a los ratones que parece quieren tranquilidad en sus cuevas. La solución funciona y, además, los burros son animales tranquilos, agradecidos y muy nobles».
José Luis Vigón, de Sidra Orizón, con el rebañu de burros que pastan en una pumarada naveta.