NOREÑA

Reencuentro en Noreña después de 40 años

Encuentro de hermandad de Anabel Gutiérrez con las que fueron sus primeras alumnas, 40 años después.


Facebook propició la localización de la profesora de 6? de EGB y las que fueron sus primeras alumnas compartieron encuentro con ella.

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La página de Facebook “Nun yes de Noreña si...” ha hecho posible que casi 40 años después la profesora Anabel Gutiérrez, hija del profesor Don Alfredo, director de la escuela de Noreña, se reencontrase con las alumnas a las que impartió clase en un primer curso como docente. El pasado viernes se hizo realidad este encuentro entre las estudiantes de la promoción del año 1973-1974 en 6º de EGB y su querida maestra.
«Fue de forma casual», asegura Anabel, «en la página de Facebook de Nun yes de Noreña si... publicaron una foto en la que hablaban de mi padre. En uno de los comentarios decían que “a mi me dio clase su hija”. Fue entonces cuando comenzó todo».
La persona que realizó este contacto fue Pili Cuesta, la actual concejala de Cultura. Así establecieron contacto y meses después, la maestra regresaba a su localidad natal después de más de cuatro décadas en tierras andaluzas donde desarrolló su vida profesional.
La profesora, que bien puede pasar por una de sus alumnas, se mostraba muy contenta con este reencuentro. «Llevaba muchos años sin venir a Noreña», aseguraba. La cita tuvo lugar en el restaurante La Tenería. Muchas de ellas, todavía continúan en contacto, pero otras también regresaban a la villa después de muchos años. Cuesta reconoce que «No hemos podido localizar a todas, pero aquí hay una representación».
Para Gutiérrez fue un curso muy especial «fu el primero sólo tenía 20 años y me marcó. Siempre hablé de este curso al resto de mis alumnos». La maestra reconoce que eran «unas estudiantes muy buenas y la muestra está en que muchas se dedican a la docencia, pero  hay médicos e incluso tenemos a la alcaldesa de Noreña». Además, apostilló que «siempre he dicho que en la vida haciendo esfuerzos consigues muchas cosas».
Aquel curso se impartió en los antiguos salones parroquiales por estará en obras el Colegio de las monjas. Todas recuerdan a aquella maestra tan joven «y que vestía minifalda».