A partir del 1 de enero, la gestión de residuos será sustancialmente más cara en Asturias. Una tendencia nacional que busca cumplir con la normativa europea y que hoy ha contado con el visto bueno de la comisión delegada del Consorcio para la Gestión de Residuos Sólidos de Asturias (Cogersa).
La medida encarece en un 43% en coste que para los ayuntamientos tiene la basura que llega a la planta de la asociación en la llamada "bolsa negra", en la que los usuarios no separan para reciclar, y que se traduce en que la tarifa de tratamiento de basura pasará de los 67 euros por tonelada actuales a 96 euros. Un coste que los ayuntamientos de los distintos concejos tendrán que gravar de forma paulatina sobre los ciudadanos.
Si bien Cogersa incrementa notablemente el coste por tonelada en lo que respecta a la "bolsa negra", continúa manteniendo el coste cero para aquellos ayuntamientos que logren que los desechos que generan lleguen separados al complejo de Serín, punto de tratamiento de residuos del consorcio.
Con vistas a paliar este incremento que busca adaptarse a la legislación europea, que impide el vertido sin tratamiento previo y dicta la recuperación de materiales para el reciclaje, el Principado de Asturias estudiará «ayudar para que la subida sea progresiva». Así lo ha declarado Nieves Roqueñí, consejera de Transición Ecológica y presidenta de Cogersa, durante la comisión celebrada hoy.
Además la consejera incidió en que, hasta la fecha, buena parte de los ayuntamiento tanto de Asturias como a nivel nacional no cargaba «al contribuyente íntegro el coste de tratamiento de la basura, lo que implica que los vecinos han estado pagando por debajo de lo que vale este tratamiento». Algo que puede cambiar y afectar notablemente a los bolsillos de los ciudadanos ya que, a partir del 1 de enero de 2025, la ley obliga a los ayuntamientos a reflejar en las tasas de basura el coste completo de los mismos. Un detalle que puede incrementar más si cabe lo que cada ciudadano tendrá que desembolsar.
