El fraude que ahora se juzga se destapó hace 13 años en Cangas de Onís

Abogados de los estafados del caso “Banco Pastor” no descartan un acuerdo antes del juicio

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photo_camera Afectados de caso "Banco Pastor" manifestados, en julio de 2013, delante de la oficina del Banco Popular de Cangas de Onís.

El lunes está fechado el inicio de las sesiones del juicio de la estafa bancaria conocida como caso "Banco Pastor” o “Caso Manolín”, que se destapó hace trece años en la oficina de Cangas de Onís de esta entidad gallega (absorbida por el Banco Popular y ahora ya Banco Santander).

Hace semanas que los carteros de Servicio de Correos de Cangas de Onís repartieron decenas de citaciones entre afectados y testigos, que tendrán que desfilar desde el lunes, 4 de marzo, por la sección segunda de la Audiencia Provincial de Oviedo.

La Fiscalía pide ocho años de prisión para Manolo Mori “Manolín”, antiguo director de la oficina del Banco Pastor de Cangas de Onís, que cuando se destapó el presunto desfalco, él mismo reconoció haber creado una banca paralela que operó durante más de una década,  La Fiscalía le acusa de un delito de apropiación indebida continuada que afectaría a 45 de los que eran sus clientes, por un monto total de 5 millones de euros.

¿Acuerdo antes del juicio del caso Banco Pastor?

EL FIELATO ha podido saber que entre los abogados de varios de los estafados no se descarta que el mismo lunes se llegue a un acuerdo, «que Mori acuerde con la Fiscalía una pena inferior a esos ocho años que pide el ministerio fiscal, y que el Banco Santander cubra el agujero que el acusado habría causado en las finanzas de los afectados», aseguran. Otra cosa sería el caso de los numerosos beneficiados por los préstamos de dinero que hacía Mori de manera discrecional, unos que han reconocido haber percibido ese dinero, en la mayoría de los casos creyendo que era del propio Mori y otros que, señalados en su día por el acusado, durante las semanas que colaboró con los auditores del banco tras destaparse el fraude, niegan la mayor y no reconocen haber recibido dinero alguno.