José Junquera Peña (Argüelles, 1946), acaba de publicar “Más lejos está el sol”, su libro «más personal» y el pasado viernes, el salón de actos de la Casa de Cultura de Noreña se llenó para la primera presentación, en la que participaron la alcaldesa, Amparo Antuña, el escritor y musicólogo Javier Almuzara y Esther Prieto, de Ediciones Trabe. Además, como sorpresa, La Rondalla de Noreña, formación dirigida por Tere Cano y de la que Junquera es miembro, interpretó tres de los temas que aparecen en el libro.
«Fue muy emocionante», asegura el autor, vecino de Argüelles, que agradece la acogida que ha tenido su obra y de la que le llegan numerosos mensajes. «Me siento muy querido por la gente de Noreña y creo que es recíproco, yo me encuentro como en casa», asegura.
Si al leer un libro ignoramos nuestras propias vivencias y no tratamos de enmendar aquellas que debieran serlo, habremos perdido una oportunidad que quizá no se repita
Cuenta Junquera que «si en algún momento nos sorprendiésemos riendo, llorando, cantando o hablando en la más estricta soledad, casi seguro que estaremos oyendo música o leyendo un libro». Y a esas emociones se remite con un diario de viaje lleno de relatos en los que vuelve a lugares visitados y redescubre vivencias. «Tiene un poso melancólico, está escrito con mucho sentimiento porque además es un homenaje a todas esas personas con las que me fui encontrando y pone de manifiesto la trascendencia y la importancia de los momentos compartidos», explica.
El lector puede acompañarlo así en su aventura de juventud a Montevideo, a donde viajó para conocer a una chica con la que se envió cartas durante doce años. También por Italia, país al que llegó tras un periplo en tren desde Oviedo. O por los parajes de Austria, Hungría o Noruega.
Asimismo, Junquera defiende que la lectura sumerge en el recuerdo. «Si al leer un libro ignoramos nuestras propias vivencias y no tratamos de enmendar aquellas que debieran serlo, habremos perdido una oportunidad que quizá no se repita», señala.
En los textos, además, une sus dos pasiones, la música y la literatura. «Me ha ayudado mucho reflexionar escribiendo», asegura. Y hace suya la frase de Francisco Umbral, «escribir es la manera más profunda de leer la vida».
Entre sus próximos proyectos está recopilar todos los artículos que ha publicado en el porfolio de las fiestas del Ecce Homo e ilustrarlos. Además, señala que en la creación de “Más lejos está el sol” quedó fuera mucho material que daría para una segunda parte.
