Las jornadas gastronómicas pueden disfrutarse hasta el domingo

En Noreña se come bonito

bonito-norena-02
photo_camera Miguel Berlanga, a punto de degustar un tartar de bonito en El Casero.

Jornadas del Bonito en Noreña

Nada que envidiar a cualquier sitio de costa, en Noreña hay muy buena cocina de bonito». Mayte Martínez está al frente de El Casero de la Villa Condal, uno de los diez establecimientos que hasta el domingo participan en las VII Jornadas del Bonito de Noreña, organizadas por la Junta Local de Hostelería, y defiende el buen hacer del sector en los fogones. «Es algo común a todos los establecimientos», asegura.

En su caso, ha incorporado once propuestas a la carta y la idea es mantenerlas hasta que finalice la temporada. Recetas clásicas como el rollo de bonito o las cebollas rellenas de bonito fresco comparten espacio con otras más innovadoras, como el tartar de bonito, el bonito con teriyaki o el arroz con bonito y pisto. «Las jornadas están teniendo muy buena acogida, viene gente de fuera y se nota; están muy bien como aliciente», señala.

bonito-norena-01

Pablo Fernández, del restaurante Carbón, muestra una de sus especialidades.

También en el Restaurante Carbón han apostado por combinar lo clásico y lo moderno. Así, además de la ventresca o del bonito a la plancha con sofrito de ajo y patatas panadera, puede degustarse a la plancha con mayonesa de soja y alga wakame.

Cristina Gafitescu, desde la Vinatería Envero, confía en que las jornadas sirvan para atraer clientela. En su caso, que no llueva también es fundamental, ya que el grueso de su negocio está en la terraza.

Lo mismo ocurre en el Café Bar La Oficina. Mercedes Estrada aprovechó el fin de semana para incorporar el bonito al pincho de cortesía en forma de sorropotún, al estilo de San Vicente de la Barquera, guisado y servido en cazuelitas.

Las jornadas también pueden disfrutarse en El Fíu Chiti, Rolsán, Letual, Sidrería Guarapu, Ostería El Topo y el Hotel Cristina.