A las diez de la mañana del pasado martes, 20 de enero, vecinos de Cayés cortaban la carretera As-17 a su paso por el barrio de La Venta del Gallo, para reclamar el cumplimiento del derribo de las viviendas abandonadas. Se trata de cinco casas que están en ruina técnica. «Son focos de infección e insalubridad que afectan directamente a los vecinos que, además, carecen de todo tipo de saneamiento», señala el presidente de la asociación de Vecinos de Cayés, Luis Álvarez.
El colectivo denunció esta situación a la Dirección de Salud Pública. «Nos contestaron que en este asunto la competencia es del Ayuntamiento», señala. El Consistorio, hasta la fecha «no ha dado contestación». Por lo que han decidido cortar la carretera tras agotar todas las vías.
«Esta es una primera medida», asegura Álvarez. «Ahora vamos a dejar un tiempo prudencial para que el Ayuntamiento actúe», explica, de lo contrario «no descartamos continuar con las movilizaciones», puntualizó.
Una de sus vecinas, Aída Suárez, señala que «La Venta del Gallo carece de muchas cosas, entre ellas el saneamiento». Además reconoce que los cortes de agua «son constantes». La red está obsoleta.
Además, tal como explica Álvarez, también reclaman una protección integral medioambiental de este barrio «que está muy degradado y olvidado».
