09/feb./23 - 23:26

Ribadesella

Fundado por Alfonso X el Sabio, esta localidad asturiana fue un importante puerto pesquero en el siglo XIX. La economía local está basada en el turismo, con lugares tan apreciados como la cueva de Tito Bustillo y sus conocidas pinturas prehistóricas. Además, es una zona muy popular para actividades al aire libre. Con una población actual de unos 5600 habitantes, Ribadesella es un destino turístico de los más frecuentados en Asturias.

La prehistoria de Ribadesella es un período poco conocido, pero repleto de interesantes descubrimientos. La cueva de Tito Bustillo, ubicada en el concejo de Ribadesella, es una de las más importantes y mejor conservadas del período paleolítico en Europa. Esta cueva ha sido objeto de numerosos estudios y excavaciones, y ha proporcionado información valiosa sobre las culturas prehistóricas que habitaron esta región. Esta cueva es especialmente conocida por sus impresionantes pinturas rupestres, que incluyen representaciones de animales, cazadores y paisajes. Algunas de estas pinturas se han datado en torno a 22.000 años a.c., lo que las convierte en uno de los primeros ejemplos conocidos de arte en Europa. Además de las pinturas, la cueva también ha proporcionado importantes hallazgos arqueológicos, como herramientas de piedra y restos de animales extintos, como los mamuts y los rinocerontes. Estos hallazgos son un testimonio del modo de vida de las culturas prehistóricas que habitaron esta región y ofrecen una valiosa perspectiva sobre la evolución humana y la historia de la vida en la Tierra.

Se cree que la villa fue fundada por Alfonso X el Sabio en el siglo XIII, y aunque no hay muchas referencias escritas de su existencia en esa época, se pueden encontrar menciones en textos medievales de la importancia de su puerto y su actividad comercial. Durante la Edad Media y el Renacimiento, Ribadesella continuó siendo un lugar importante y su puerto y economía florecieron gracias a la actividad pesquera y la captura de ballenas. Estas referencias muestran la importancia económica de Ribadesella a lo largo de los siglos, y su influencia en la región del Principado.

La creación de esta localidad asturiana se enmarca en el contexto de la expansión territorial y política que el rey quería llevar a cabo en el norte de España. Tenía como objetivo establecer un puerto de importancia en la costa cantábrica, con el fin de potenciar el comercio y la actividad naval.

La villa de Ribadesella se convirtió en un importante punto de tránsito para la comunicación entre el mar Cantábrico y el interior del país.

Además, la fundación permitió la consolidación de la presencia cristiana en la región y la defensa de la frontera contra los reinos musulmanes. La villa de Ribadesella se convirtió en un punto de apoyo para la guerra de la Reconquista y una fortaleza importante en la lucha contra el Islam. La importancia política y comercial de Ribadesella durante la Edad Media y la Edad Moderna se debió en gran parte a su fundación por "El Sabio". La villa se convirtió en una plaza importante en el plano político y económico, y su legado perdura hasta el día de hoy.

La Edad Media y Moderna en Ribadesella estuvo marcada por un momento de esplendor y un posterior declive. Durante la Edad Media, la villa de Ribadesella floreció gracias a su actividad naval y comercial, con la captura de salmones y cazas de ballenas siendo fuentes importantes de ingresos. La Casa de las Ballenas, aún presente en la villa en el siglo XIX, es un testimonio de esta época de prosperidad. Además, Ribadesella se convirtió en un lugar muy codiciado políticamente debido a su riqueza y situación estratégica. Sin embargo, durante la Edad Moderna, la villa experimentó un declive debido a la disminución de la actividad naval y la pérdida de importancia política.

El concejo de Ribadesella limita al este con Llanes, al sur con Cangas de Onís y Parres y al oeste con Caravia. Con una superficie de 83.7 km², Ribadesella es uno de los concejos más extensos de la región.

Desde su fundación, Ribadesella ha experimentado un crecimiento territorial constante. En el siglo XV, se incorporaron varios territorios circundantes. Durante la Edad Media y la Edad Moderna, Ribadesella amplió aún más sus fronteras, incluyendo varios valles y montañas en su concejo. La expansión territorial de Ribadesella también se reflejó en el desarrollo de su población. Con la llegada de nuevos habitantes, se crearon nuevos núcleos de población y se fortalecieron los existentes. Esto permitió a Ribadesella convertirse en una de las principales ciudades asturianas en términos demográficos y económicos. La extensión de esta localidad en el Principado de Asturias ha sido fundamental para el desarrollo de su economía. Su localización en el litoral cantábrico le ha permitido desarrollar un sector turístico floreciente, gracias a la belleza natural de sus playas y montañas.